Este fin de semana en Florida, representantes de Estados Unidos, Ucrania y Rusia se sentaron alrededor de la mesa con la esperanza de avanzar hacia un alto el fuego que ponga fin al conflicto de casi cuatro años. Aunque las charlas fueron calificadas de “productivas y constructivas”, los obstáculos siguen siendo grandes.
Conversaciones “productivas” 🤝
El sábado, el enviado especial de EE.UU., Steve Witkoff, se reunió con el representante de Putin, Kirill Dmitriev. Al día siguiente, Witkoff y el asesor de Trump, Jared Kushner, se encontraron primero con delegados de Ucrania y Europa, y luego con la delegación ucraniana liderada por Rustem Umerov.
En su cuenta de X, Witkoff describió las jornadas como “productivas y constructivas” y destacó un “enfoque estratégico compartido entre Ucrania, Estados Unidos y Europa”. Según él, la discusión se centró en cuatro puntos clave: desarrollo del plan de 20 puntos redactado por EE.UU., creación de un marco multilateral de garantías de seguridad, un esquema de garantías de seguridad estadounidense para Ucrania y avances en economía y prosperidad para la reconstrucción del país. Además, los negociadores pusieron especial atención en los “plazos” y la “secuencia de los próximos pasos”.
Rustem Umerov subrayó el compromiso de Ucrania con “una paz justa y duradera” y señaló que la prioridad es “detener los actos de violencia, garantizar la seguridad y crear condiciones para la recuperación, la estabilidad y la prosperidad a largo plazo”. Para él, la paz no es solo el fin de las hostilidades, sino también “una base digna para un futuro estable”.
Diferencias y retos pendientes 🌐
Sin embargo, las diferencias persisten. Yuri Ushakov, asesor de política exterior del Kremlin, afirmó que la inclusión de propuestas ucranianas y europeas no ha mejorado las perspectivas de paz. Dmitriev regresará a Moscú para informar a Putin y, en base a ello, definirán su posición para las próximas conversaciones con EE.UU.
El plan de 20 puntos ha sido el eje de varias rondas de diálogo, impulsadas por la presión del presidente Donald Trump para lograr un acuerdo rápido. Rusia, en cambio, quiere mantener el control de los territorios ocupados, mientras que Ucrania se niega a ceder.
Expertos como Su Xiaohui, investigador del China Institute of International Studies, advierten que una “solución de paz” no se alcanzará en el corto plazo. La soberanía territorial y las metas estratégicas divergentes de EE.UU. y Rusia hacen difícil un consenso. Mientras el norte busca avances rápidos para retirarse del conflicto, Rusia pretende una resolución más profunda de sus diferencias con Occidente. Así, a pesar de las señales positivas, la paz real aún está lejos.
Reference(s):
Ukraine talks: Challenges persist despite 'productive' negotiations
cgtn.com
