La OTAN enfrenta una división mientras sus miembros debaten un audaz nuevo objetivo de gasto en defensa. Italia, liderada por la primera ministra Giorgia Meloni, anunció que trabajará para asignar el 5% de su PIB a la defensa, aunque al país le tomará 10 años alcanzar esta meta. Mientras tanto, España, con el primer ministro Pedro Sánchez a la cabeza, ha limitado su gasto militar al 2.1% del PIB, marcando una clara divergencia en el enfoque.
La próxima cumbre de la OTAN, programada de martes a miércoles, está destinada a destacar este controvertido objetivo del 5%. Mientras que países como Estonia instan a una rápida alineación con la nueva meta, las posturas variadas revelan divisiones más profundas. Los expertos advierten que sin una estrategia coordinada, los presupuestos de defensa aumentados pueden correr el riesgo de convertirse en meros gestos políticos en lugar de inversiones transformadoras en seguridad. 🚀🤔
El profesor Stefan Wolff de la Universidad de Birmingham señaló, "Si la OTAN no puede ponerse de acuerdo sobre su propósito principal, incluso las fuerzas bien financiadas carecerán de una dirección compartida." En eco de estas preocupaciones, Li Haidong de la Universidad de Asuntos Exteriores de China destacó que aumentar el gasto en defensa presenta desafíos económicos significativos. Subrayó que metas tan ambiciosas podrían tensar el desarrollo social y económico, amplificando las divisiones internas.
A medida que continúan los debates, la OTAN se encuentra en una encrucijada donde las prioridades nacionales divergentes podrían moldear su futuro papel e influencia. Las discusiones que se desarrollen en la cumbre serán clave para definir no solo la estrategia de defensa de la alianza, sino también su unidad general frente a las amenazas globales en evolución. 🔥
Reference(s):
Disunity in NATO: Member states split on push for 5% defense spending
cgtn.com
