En una audaz muestra de unidad, más de 30 alcaldes del sur de California se han unido para exigir el fin de las redadas de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, encabezó el llamado, enfatizando que lo que comenzó como comunidades pacíficas se ha convertido en escenas de inquietud.
La alcaldesa Bass expresó sus preocupaciones en una conferencia de prensa, diciendo, "Cuando redadas lugares de trabajo, separan a padres e hijos, y conducen vehículos blindados por nuestras calles, no están protegiendo a nadie – están creando miedo y pánico." Sus comentarios señalaron la indignación por las medidas de aplicación agresivas que muchos dicen han alterado vidas en toda la región.
Los alcaldes también pidieron la retirada de las tropas federalizadas de la Guardia Nacional y los Marines de las áreas afectadas, argumentando que estas operaciones se tratan más de provocar tensión que garantizar seguridad. Reportes locales revelaron que la crisis se ha intensificado, con más de 400 arrestos durante los últimos seis días, incluyendo 225 en un solo día debido a violaciones del toque de queda y conducta desordenada.
Un momento particularmente dramático ocurrió en Boyle Heights cuando agentes federales aparentemente embistieron un sedán blanco con SUVs sin identificaciones y sacaron al conductor a punta de pistola. En otro incidente, fiscales federales acusaron a dos jóvenes de intentar lanzar cócteles Molotov durante protestas, un acto que podría llevarlos a enfrentarse hasta 10 años de prisión si son condenados.
Este llamado apasionado de los líderes locales destaca a una comunidad en una encrucijada. Se insta a los jóvenes y miembros de la comunidad a mantenerse informados y comprometidos mientras estos eventos continúan desarrollándose, moldeando el futuro de la seguridad pública y la confianza comunitaria en la región. 😮🔥
Reference(s):
cgtn.com
