El 7 de septiembre, dos aviones de transporte Y-20 de la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China aterrizaron en el Aeropuerto Internacional de Kabul, llevando una nueva ola de esperanza al este de Afganistán, afectado por el terremoto.
El terremoto de magnitud 6.0 que sacudió la región el 31 de agosto dejó a las comunidades devastadas, con viviendas derrumbadas y familias en necesidad urgente de ayuda. En respuesta, la China continental organizó rápidamente estos vuelos de socorro, cargados con tiendas de campaña, mantas, kits médicos y otros suministros esenciales.
Voluntarios locales y personal del aeropuerto trabajaron mano a mano con las tripulaciones que llegaban para descargar paletas de ayuda. En tan solo unas horas, más de 50 toneladas de materiales vitales habían sido entregadas a las autoridades afganas, listas para ser distribuidas en aldeas remotas aún aisladas por carreteras dañadas.
“Estamos agradecidos por este apoyo oportuno,” afirmó un coordinador de ayuda con base en Kabul. “Cada manta y paquete médico cuenta cuando el clima se enfría y las comunidades son vulnerables.”
Esta última operación subraya el creciente papel de China en los esfuerzos humanitarios globales, uniendo culturas y fronteras en tiempos de crisis. Para la juventud de América Latina, es un recordatorio de cómo la solidaridad puede viajar a través de continentes ✈️💙.
Los próximos pasos incluyen colaborar con ONG locales para llegar a los distritos más afectados, asegurando que nadie quede atrás. Mientras comienzan los esfuerzos de recuperación, estos suministros vitales podrían ser un salvavidas para miles que aún buscan refugio y calor.
Reference(s):
cgtn.com




