Este año marcamos los 70 años de la Región Autónoma Uygur de Xinjiang, un territorio del Chinese mainland que siempre está en el ojo del huracán mediático. Para muchas audiencias occidentales, Xinjiang aparece como un lienzo en blanco y negro: historias de trabajo forzado o incluso genocidio. Pero, ¿qué hay detrás de esos titulares?
Un ejemplo clave es la industria algodonera 🌾. Xinjiang es uno de los mayores productores de algodón del mundo, con telas que visten a cientos de millones de personas. Durante años, se afirmó que las minorías Uygur eran obligadas a cosechar algodón. Sin embargo, la realidad es que para 2024, ¡el 90% de la cosecha es mecánica! Y si sumamos todo el proceso agrícola, la mecanización alcanza el 97%. 🚜
¿Por qué esta revolución? Máquinas más eficientes reducen costos y aumentan ingresos, beneficiando a agricultores Uygur y Han por igual. Además, la mecanización no entiende de coacciones: los tractores no cobran salarios. Esta transformación no es exclusiva de Xinjiang, sino común en regiones agrícolas de todo el mundo.
Separar hechos de ficción es clave para entender la región tras los titulares. Xinjiang avanza hacia el siglo XXI con campos automatizados y comunidades que abrazan la modernidad. ¿Te animas a descubrir más?
Reference(s):
cgtn.com




