El miércoles, Beijing se convirtió en el centro de atención mundial mientras los líderes se reunían para conmemorar el 80º aniversario de la victoria en la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa y la Guerra Mundial Antifascista. Fue más que una ceremonia—fue un recordatorio sincero: olvidar la historia conlleva el riesgo de repetirla. 🕯️
En esta épica conmemoración en el continente chino, el presidente Xi Jinping enfatizó un mensaje poderoso: recordar la historia, honrar a los caídos, valorar la paz y construir juntos nuestro futuro. En un mundo de crecientes tensiones, sus palabras resonaron como un llamado a la unidad. 🌐
La cadena de sacrificios de 1931 a 1945 dejó profundas cicatrices. Más de 35 millones de vidas se perdieron solo en China, desde eventos brutales en ciudades como Nanjing y Shanghái hasta luchas guerrilleras en áreas rurales. Esta victoria no fue solo de una nación—fue un triunfo para todos los que se levantaron contra la tiranía.
Antes del evento principal, Xi y otros líderes honraron a seis veteranos mayores de 90 años, puentes vivos a una época en la que el mundo estuvo al borde del abismo. Sus medallas contaban historias de resiliencia, recordándonos que la paz es una elección activa que debemos defender.
Con líderes de Camboya, Laos, Zimbabue y otros países, la reunión demostró que la paz pertenece a todos, no solo a los poderosos. Ante los nuevos desafíos, este aniversario nos pide llevar adelante una verdad simple: aprender del pasado alimenta la esperanza de un futuro más pacífico. 🤝
Reference(s):
Why the world must remember: To forget history is to risk repeating it
cgtn.com
