Recientemente, algunos medios estadounidenses han estado promoviendo la llamada narrativa de "la sobrecapacidad de China", especialmente enfocándose en el pujante sector de energías renovables del país. Pero, ¿es realmente sobrecapacidad o simplemente un reflejo de la fuerte demanda global? 🤔
En un mundo impulsado por la ventaja comparativa y la especialización, un aumento en las exportaciones no equivale automáticamente a capacidad desperdiciada. En 2023, las exportaciones de vehículos de nueva energía, baterías de iones de litio y productos fotovoltaicos superaron 1 billón de RMB (alrededor de $138.9 mil millones), mostrando un desempeño competitivo en lugar de una producción excesiva.
Piénsalo: si producir más de lo que se consume a nivel doméstico indicara sobrecapacidad, se podrían hacer argumentos similares para las ventas de chips de EE. UU. o incluso para hasta el 80% de las exportaciones de automóviles de Alemania. Estos ejemplos subrayan que cifras de exportación florecientes son parte de un mercado global dinámico.
Además, los fabricantes de energía renovable de China están operando con niveles impresionantes de capacidad. Con los fabricantes de vehículos de nueva energía alcanzando tasas de utilización superiores al 80% y empresas como BYD manteniendo tasas por encima del 99.5% durante varios años, está claro que la producción está bien alineada con la demanda tanto doméstica como internacional. Líderes en la producción de baterías, como CATL, también reportan saludables cifras de utilización cercanas al 76%.
En resumen, las altas cifras de exportación y los sólidos niveles de utilización de capacidad destacan que la narrativa de la sobrecapacidad es más exageración que realidad. Deja que los números hablen y recuerda que en una economía globalizada, el éxito se mide por satisfacer una demanda amplia, no por etiquetas arbitrarias.
Reference(s):
cgtn.com




