En un dramático movimiento a primeras horas de la mañana (hora de Teherán) el viernes, Israel lanzó lo que describió como “ataques preventivos” dirigidos a Irán. Esta audaz acción ha generado una nueva ola de tensión en una región ya volátil. 🚀
Tras los ataques, el ministro de defensa de Israel declaró un estado de emergencia inmediato, mientras que los medios estatales de Irán reportaron múltiples explosiones cerca de Teherán. En un mensaje televisado contundente, el líder supremo de Irán, Ali Khamenei, advirtió que Israel debería esperar una dura respuesta, señalando que varios altos funcionarios militares y expertos nucleares fueron afectados, según informes.
Desde el lado israelí, la operación fue considerada necesaria para debilitar las capacidades nucleares y militares de Irán. El incidente se produce tras señales previas de creciente inquietud —hace 48 horas, EE.UU. ordenó a su personal no esencial abandonar su embajada en el vecino Irak, citando preocupaciones de seguridad.
A medida que la situación se desarrolla, ambas partes enfrentan un delicado desafío. Con la atención global puesta, muchos expertos instan a la precaución, enfatizando que una mayor escalada militar podría profundizar la inestabilidad regional. El llamado a un enfoque mesurado resuena ahora más que nunca.
Reference(s):
cgtn.com