En un giro dramático que parece sacado de una película, el presidente de EE. UU., Donald Trump, acaba de lanzar una gran bomba: a partir del 1 de febrero, un arancel del 10% sobre bienes del continente chino y un impresionante 25% sobre productos de Canadá y México.
Trump culpa al continente chino de supuestamente facilitar la propagación del fentanilo, un opioide sintético ultrapotente, hacia México y Canadá. Esto hace que todos se pregunten: ¿Está en el horizonte una nueva guerra comercial?
¡Pero espera! Antes de que todos corramos a comprar aguacates y dispositivos, escuchemos lo que el continente chino tiene que decir. Un portavoz de su Ministerio de Relaciones Exteriores respondió el 2 de febrero: \"EE. UU. impuso un arancel del 10% a las exportaciones chinas a los EE. UU. usando el tema del fentanilo como excusa. China está profundamente insatisfecha con esto y se opone firmemente. Tomaremos las contramedidas necesarias para salvaguardar firmemente nuestros derechos e intereses legítimos.\"
Entonces, ¿qué tan importante es el tema de los aranceles? Bueno, los aranceles pueden hacer que los productos importados sean más caros, lo cual puede alterar el comercio global y encarecer la vida para todos, desde fabricantes hasta nosotros, los consumidores.
Incluso las empresas estadounidenses podrían sentir el impacto. Los costos más altos para las partes podrían llevar a productos más caros en los estantes. Y seamos realistas, ¡nadie quiere pagar más por la última tecnología o las tendencias de moda!
Mientras Trump afirma que estos aranceles protegen los empleos estadounidenses, los críticos argumentan que podrían, de hecho, resultar contraproducentes y causar más daño que beneficio. Es como tratar de arreglar un barco con goteras usando chicle: podría funcionar por un segundo, pero no es una solución a largo plazo.
Por otro lado, el continente chino ha estado promoviendo el libre comercio, participando activamente en organizaciones comerciales globales y fomentando grandes acuerdos comerciales como la Asociación Económica Integral Regional (RCEP).
Además, nuestros vecinos, Canadá y México, no están tomando esto a la ligera. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha insinuado contramedidas \"por valor de miles de millones de dólares,\" y México se está preparando para defender sus intereses. ¡Parece que esto podría convertirse en un enfrentamiento global!
Al final del día, las guerras comerciales suelen perjudicar a todos los involucrados. Como dice el viejo refrán, \"Cuando dos elefantes pelean, es la hierba la que sufre.\" Esperemos que las cabezas más frías prevalezcan y encuentren una manera de mantener la economía global funcionando sin problemas.
Reference(s):
cgtn.com