🌍 **Los eventos de clima extremo están sacudiendo al mundo, y se están sintiendo cerca de casa.**
En un trágico giro de los acontecimientos, más de 330 personas perdieron la vida cuando fuertes tormentas y lluvias torrenciales arrasaron con grandes partes de Afganistán. La provincia norteña de Baghlan fue la más afectada, con más de 300 fallecidos y más de 1,000 hogares destruidos. Las familias se han quedado sin hogar y las comunidades están lidiando con las secuelas.
Mientras tanto, en el otro lado del mundo, el sur de Brasil enfrenta su propia catástrofe. Dos semanas de lluvias récord causaron inundaciones masivas y deslizamientos de tierra en todo el estado de Rio Grande do Sul. El número de muertos ha aumentado a 143, convirtiéndolo en el peor evento de clima extremo que ha golpeado la región. Con 125 personas aún desaparecidas y más de 600,000 evacuadas, el impacto es inmenso. 🌧️💔
Porto Alegre, la capital del estado, vio más de la mitad de su área sumergida bajo el agua. El gobernador Eduardo Leite anunció que se necesitarán alrededor de 19 mil millones de reales (aproximadamente $3.7 mil millones) para reconstruir tras las inundaciones. La escala de la devastación es algo que muchos de nosotros nunca hemos visto antes.
Estos eventos plantean una pregunta urgente: **¿Están estos fenómenos de clima extremo convirtiéndose en nuestra nueva normalidad?** Los expertos en clima sugieren que los patrones globales están cambiando, llevando a eventos climáticos más frecuentes y severos. Para nosotros en América Latina, esto no es solo una noticia lejana, es una realidad que podría afectar a nuestras propias comunidades.
Es momento de mantenerse informados, apoyar a los afectados y participar en conversaciones sobre cómo podemos contribuir a un futuro más sostenible. 🌱✨
Reference(s):
cgtn.com
