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Imagina despertarte un día y encontrar que tus tierras de cultivo han sido tragadas por un lago 
. Esa es la realidad para el agricultor Babis Evangelinos en el centro de Grecia. Árboles de almendra que antes prosperaban ahora están sumergidos, sus ramas extendiéndose como testigos silenciosos de un mundo cambiante.
\"Nunca pensé que necesitaría un bote para ver mi propia tierra,\" dice Evangelinos, navegando sobre lo que solía ser su sustento. \"El trabajo de toda una vida, perdido en solo unos días de lluvia.\"
La llanura de Tesalia, un pilar clave de la producción agrícola en Grecia, se ha convertido en un humedal inesperado. Decenas de miles de acres de campos de algodón, huertos de almendras y tierras de pastoreo están bajo el agua, víctimas de inundaciones sin precedentes que ocurrieron el año pasado.
Pero no se trata solo de un agricultor. Esto podría ser una escena de una película de desastres 
, pero está ocurriendo en la vida real, y es un llamado de atención para todos nosotros. La maquinaria destinada a proteger estas tierras está varada, mientras las aves que nunca solían visitar ahora revolotean—la naturaleza reclamando su territorio.
El clima extremo está reescribiendo las reglas, y los agricultores en toda Europa están en la primera línea. Si esto puede suceder en Grecia, ¿quién será el próximo? Es un recordatorio de que el cambio climático no es una advertencia lejana—está aquí, y está causando estragos. Literalmente.
Mientras pasamos por nuestros feeds 
, pensemos en aquellos cuyas tierras están desapareciendo bajo sus pies. ¿Qué podemos hacer para marcar la diferencia? 
Reference(s):
Flooded Greek lake an alarm to European farmers battling extreme weather
cgtn.com
