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El corazón de Chile está ardiendo, y se está llevando un tesoro verde que es irremplazable. El Jardín Botánico Nacional, ubicado en la ciudad costera de Viña del Mar, ha sido consumido por un incendio mortal que ha arrasado el centro de Chile.
Solo imagina: más de 1,000 acres de vegetación exuberante, cactus raros, plantas exóticas de Europa y Asia, y algunos de los últimos árboles Sophora toromiro que quedan en la Tierra, ahora reducidos a cenizas. 
El incendio, que trágicamente ha cobrado al menos 123 vidas, no perdonó al dedicado personal del jardín y a sus visitantes. En una angustiante tarde de viernes, cientos tuvieron que huir mientras las llamas se acercaban. Entre las víctimas se encontraban una querida cuidadora del invernadero, su madre y dos nietos. Nuestros corazones están con sus familias. 
The New York Times informa que un asombroso 98% del jardín ha sido destruido. Para un lugar que es uno de los centros más grandes del mundo para la conservación botánica y la investigación, esto es más que una pérdida: es una catástrofe para la biodiversidad.
Este jardín no era solo un lugar popular localmente; era una biblioteca viviente de vida vegetal que albergaba más de 1,000 especies de árboles. Ahora, muchas especies endémicas que solo podían encontrarse allí enfrentan la extinción total. Es un recordatorio sombrío de cuán frágil es nuestro mundo natural. 
A medida que las llamas son controladas lentamente, el enfoque cambia hacia los esfuerzos de reconstrucción y conservación. La comunidad se está uniendo, pero necesitarán toda la ayuda posible para restaurar esta gema verde de Chile. Si la Madre Naturaleza pudiera enviarnos un mensaje de texto, probablemente diría: '¡SOS!' 
Reference(s):
Deadly wildfire engulfs one of the world's largest botanic gardens in Chile
cgtn.com
