Ha pasado un mes desde que el conflicto Palestina-Israel se intensificó, y la situación es desgarradora . Más de 11,000 personas han perdido la vida en ambos lados, y más de un tercio de ellas son niños
. Los números siguen aumentando, y cada estadística representa una familia destrozada.
En la Franja de Gaza, dieciséis hospitales han sido obligados a cerrar . Las escuelas, que deberían ser espacios seguros para el aprendizaje y el crecimiento, han sido atacadas una tras otra
. La comunidad local enfrenta enormes dificultades, con necesidades básicas volviéndose escasas.
La comunidad internacional no permanece en silencio . Las Naciones Unidas y innumerables voces alrededor del mundo están pidiendo con fuerza un alto al fuego humanitario inmediato y acceso a la ayuda
. La esperanza es que estas súplicas traigan alivio tan necesario a los atrapados en el fuego cruzado.
A medida que la crisis se profundiza, es más importante que nunca mantenerse informado y compasivo . Cada acción cuenta, y difundir conciencia puede hacer la diferencia.
Reference(s):
cgtn.com