Sri Lanka está enfrentando sus tiempos más difíciles en más de siete décadas . Con una inflación creciente, cortes diarios de electricidad
, y una falta de combustible
y bienes esenciales, la frustración de la gente ha llegado a un punto de ebullición
.
El 9 de julio, en escenas dignas de una película , los manifestantes irrumpieron en las oficinas del Presidente y del Primer Ministro
, exigiendo que se escuchen sus voces. No están solo enojados; están desesperados por un cambio
.
"No vinimos aquí por diversión. Estamos aquí porque no tenemos otra opción", dice un joven manifestante . "Nuestras familias están luchando. No hay combustible para ir al trabajo, no hay gas para cocinar y los precios siguen subiendo
."
La ocupación del Palacio Presidencial no es solo una protesta; es un grito de ayuda . La juventud de Sri Lanka se está poniendo de pie, con la esperanza de guiar a su país lejos de la bancarrota y hacia un futuro más brillante
.
"Queremos un gobierno que escuche a la gente", agrega otro manifestante. "No nos iremos hasta que veamos un cambio real ."
El mundo observa mientras la nueva generación de Sri Lanka lucha por su futuro. Su valentía es un recordatorio de que cuando las cosas se ponen difíciles, los fuertes perseveran .
Reference(s):
We Talk: Sri Lankans occupying the president's palace tell their story
cgtn.com