Cuando el mundo presionó pausa debido al COVID-19, la psicóloga y arteterapeuta con sede en Barcelona, Javiera Morales Daviu, se encontró en un torbellino. Con las sesiones de terapia presencial fuera de la mesa, su ajetreada vida citadina llegó a una abrupta pausa.
Sintiendo el peso del confinamiento y la soledad de las calles desiertas, Javiera decidió que era momento de un cambio. Ella y su pareja empacaron sus maletas y se dirigieron al tranquilo abrazo del campo.
\"Cambiar el horizonte de la ciudad por colinas ondulantes no solo se trataba de un cambio de paisaje,\" comparte Javiera. \"Era sobre encontrar equilibrio y reconectarse con lo que realmente importa.\"
Desde su nuevo refugio rural, Javiera comenzó a ofrecer sesiones de terapia en línea, mezclando tecnología con el telón de fondo de la naturaleza. Los cantos de los pájaros y el susurro de las hojas se convirtieron en la inesperada banda sonora de su práctica.
\"Mudarnos aquí revitalizó no solo mi trabajo, sino mi alma,\" sonríe. \"Encontré un nuevo ritmo, uno que baila al compás de la simplicidad y la paz.\"
La historia de Javiera es un recordatorio de que a veces, reiniciar nos lleva a donde estamos destinados a estar. Para muchos de nosotros que navegamos estos tiempos inciertos, su viaje de regreso a la naturaleza podría inspirar nuestros propios caminos hacia adelante.
Reference(s):
cgtn.com