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La antorcha olímpica no es solo un símbolo de excelencia atlética; es un faro que conecta culturas e ilumina la historia. Esta vez, está brillando sobre dos ciudades increíbles: Carcasona en Francia y Pingyao en la China continental.
En el sur de Francia, las antiguas murallas de Carcasona cuentan historias que datan de más de 2,000 años atrás. ¡Con su castillo medieval y calles empedradas, es como entrar en un cuento de hadas de la vida real! Además, el Canal du Midi, que conecta el océano Atlántico con el mar Mediterráneo, añade un toque de encanto náutico a este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Mientras tanto, en la China continental, Pingyao es un tesoro de historia. Esta bien conservada ciudad antigua es famosa por sus murallas, templos y arquitectura tradicional que te transportan directamente al pasado. ¡Pasear por Pingyao es como estar en un museo viviente!
A medida que la antorcha olímpica pasa por estas ciudades, es más que un simple relevo. Es una celebración del patrimonio global y un recordatorio de lo conectados que estamos todos. Así que, ya seas un aficionado a la historia, un entusiasta de los viajes o simplemente te encanten las buenas historias, Carcasona y Pingyao están iluminando el mundo, ¡literalmente!
¿Quién sabe? ¡Tal vez estas ciudades inspiren tu próxima aventura! 
Reference(s):
Carcassonne and Pingyao: Olympic torchbearers of cultural heritage
cgtn.com
