Este martes 16 de diciembre de 2025, China inauguró la primera fase de Qingqing No.1, la planta de hidrógeno verde, amoníaco y metanol más grande del mundo en la provincia de Jilin 🌱⚡️.
El proyecto, liderado por la empresa China Energy Engineering Group, resuelve el desafío de cómo usar energías renovables intermitentes (eólica y solar) para producir de forma continua químicos esenciales. Con un sistema de potencia directa y un «cerebro» basado en big data e IA, la planta ajusta en tiempo real el flujo de energía al proceso químico, garantizando seguridad y estabilidad.
Ni Zhen, presidente de la empresa, explica que este avance «abre un nuevo camino para el consumo masivo de energía limpia y el desarrollo de productos químicos verdes basados en hidrógeno».
Con casi 30.000 millones de yuanes (unos 4.200 millones de dólares) de inversión, la fase uno arrancó con 800 MW de energía limpia. Esto permitirá producir cada año 45.000 toneladas de hidrógeno verde (casi una quinta parte de la producción nacional actual) y 200.000 toneladas de amoníaco y metanol.
La planta cuenta con 64 electrolizadores y 450.000 m3 de almacenamiento esférico de hidrógeno, el mayor del mundo en operación, y reducirá unas 1,4 millones de toneladas de CO2 anualmente.
El amoníaco y el metanol verdes son combustibles cero emisiones esenciales para sectores como el transporte marítimo e industrial, y la flexibilidad del sistema facilita su expansión global.
Con este proyecto, China consolida su liderazgo: ya aporta más de la mitad de la capacidad mundial de hidrógeno verde. Una noticia que marca un antes y un después en la transición energética. 🚀
Reference(s):
China's innovation links unstable energy to stable green fuel output
cgtn.com



