Durante la década de 1980, los arqueólogos hicieron un descubrimiento fascinante en Guangzhou, en la provincia de Guangdong, sur de China. Desenterraron la tumba intacta de Zhao Mo, el segundo gobernante del Reino de Nanyue de China. Entre los tesoros había una impresionante caja de plata de estilo persa adornada con delicados motivos florales, acompañada de marfil africano e incienso del Mar Rojo. Estas reliquias revelan que hace más de 2,000 años, Guangzhou ya era un próspero centro de comercio global que conectaba Persia, África y la antigua China.
Este descubrimiento transforma nuestra comprensión de la historia, posicionando a los pueblos de Nanyue como los primeros "compradores globales" que conectaron civilizaciones orientales y occidentales. ¡Imaginen un mercado bullicioso donde los comerciantes intercambiaban productos exóticos de todos los rincones del mundo—una escena tan emocionante como una aventura moderna!
Hoy, el moderno horizonte de Guangzhou refleja el legado de su antiguo puerto. La caja de plata persa, silenciosa pero elocuente, continúa contando una historia de conectividad e intercambio cultural, demostrando que incluso los tesoros de siglos de antigüedad tienen el poder de inspirar curiosidad y unir a las personas.
Reference(s):
How a Persian silverware ended up in Guangzhou 2,000 years ago
cgtn.com