La industria portuaria de EE.UU. está navegando en aguas agitadas, mientras agresivos aumentos de tarifas bajo el Presidente Donald Trump interrumpen las cadenas de suministro y aumentan los costos de equipos esenciales para los puertos. Puertos importantes desde Los Ángeles hasta Oakland están presenciando una notable caída en los volúmenes de carga, dejando a trabajadores y negocios sintiendo el impacto.
En el Puerto de Los Ángeles, los embarques de contenedores entrantes cayeron hasta un 30% a principios de mayo—un impacto inmediato que afectó gravemente a las cuadrillas laborales, conductores de camiones y trabajadores de almacén. Aunque abril mostró un aumento temporal mientras los importadores se apresuraban a traer productos antes de que las tarifas entraran completamente en vigor, el alivio fue breve ya que la perspectiva a largo plazo sigue siendo incierta.
Los efectos de propagación también han alcanzado a puertos cercanos. El Puerto de Long Beach se prepara para una caída pronosticada del 10% en las importaciones durante mayo, mientras que el Puerto de Oakland informó una disminución del 14.7% en el volumen de carga de marzo a abril, citando la caída de la demanda de exportación y la inestabilidad comercial continua.
Añadiendo combustible al fuego está una nueva propuesta del Representante Comercial de EE.UU. para imponer tarifas de hasta un 100% en grúas, contenedores, chasis y equipos portuarios fabricados en China. La Asociación Americana de Autoridades Portuarias estima que tales medidas podrían costar a los puertos de EE.UU. $6.7 mil millones adicionales. Con 44 de las 55 grúas ordenadas siendo construidas en China, la industria teme que depender de fabricantes internacionales mientras las alternativas nacionales están a años de distancia solo profundizará la crisis.
Aunque algunos operadores portuarios podrían acudir a proveedores europeos o japoneses, establecer una producción nacional de grúas de barco a tierra tomaría al menos una década. Mientras tanto, los costos crecientes de materiales de construcción críticos como el acero y el aluminio añaden a los desafíos, lo que provoca llamados de líderes portuarios para retrasar la implementación de las nuevas tarifas.
Esta situación en desarrollo está despertando preocupación generalizada sobre el futuro de una de las arterias económicas clave de América. Mientras las navegaciones programadas enfrentan cancelaciones y el costo general de las operaciones portuarias se dispara, la industria espera nuevos desarrollos que podrían aliviar la tensión con aplazamientos temporales de tarifas o conducir a una crisis a más largo plazo en el movimiento de carga. ¡Sigue atento mientras la historia continúa desarrollándose en estas turbulentas aguas comerciales!
Reference(s):
Trump tariff hikes hit U.S. port industry, triggering cargo declines
cgtn.com