En un giro que parece sacado de un drama de la cultura pop, la fórmula de aranceles del presidente de EE.UU., Donald Trump, está sacudiendo el comercio global ⚖️. La regla es simple: toma el déficit comercial de bienes de EE.UU. con un país, divídelo entre las exportaciones de ese país a EE.UU., y luego corta esa cifra a la mitad—siempre con un arancel mínimo del 10%.
Este enfoque tiene efectos sorprendentes. Para las economías pequeñas con exportaciones modestas, el porcentaje de arancel puede dispararse. Por ejemplo, Madagascar, una de las regiones más pobres del mundo, ahora enfrenta un asombroso arancel del 47% sobre sus $733 millones en exportaciones como vainilla, metales y ropa. En contraste, lugares como el territorio australiano de las Islas Heard y McDonald solo alcanzan la tasa mínima.
John Denton de la Cámara de Comercio Internacional lo resumió con un comentario irónico: "Presumiblemente, nadie está comprando Teslas allí." Esta fórmula contundente expone cómo las naciones con capacidad de exportación limitada son las más afectadas, con países de África y el sudeste asiático—como Lesoto con 50% y Camboya con 49%—también enfrentando aranceles elevados.
Para todos los que siguen de cerca las tendencias globales—sean estudiantes, empresarios o curiosos entusiastas de las noticias—este es un recordatorio claro de que incluso las matemáticas simples pueden tener impactos complejos en el mundo real. Cuando las políticas comerciales cambian, los jugadores más pequeños terminan pagando el precio más alto. 💡
Reference(s):
Trump's tariff formula confounds the world, hitting the poor hardest
cgtn.com