En una vibrante fusión de sonido y cultura, la violinista holandesa Anastasia Fridman, entrenada en música clásica, está llevando su arte musical más allá de las fronteras. Ahora estudiante de intercambio en el Conservatorio de Música de Shanghái, Anastasia se ha enamorado del erhu chino, un instrumento tradicional de dos cuerdas conocido por su profunda gama emocional.
Apoyándose en sus raĂces clásicas y una pasiĂłn por la innovaciĂłn, ella cree que el poder expresivo tanto del violĂn como del erhu puede trascender las asociaciones tradicionales. AsĂ como el violĂn puede evocar más que romance, el erhu puede pintar historias de alegrĂa, lucha y esperanza.
A travĂ©s de sus actuaciones, Anastasia ha emprendido un viaje para crear armonĂa entre las voces de Oriente y Occidente, construyendo un puente que conecta diversas culturas y resuena con un pĂşblico global. Su trabajo nos recuerda que la mĂşsica es un lenguaje universal, capaz de unir a las personas a travĂ©s de continentes y generaciones. 🎻🎶
Reference(s):
cgtn.com




