Mientras las tensiones disminuyen en la ciudad de Goma, en la provincia de Kivu del Norte de la República Democrática del Congo, una nueva ola de violencia está arrasando Kivu del Sur, lo que lleva a un desplazamiento generalizado y a una creciente crisis humanitaria. 🌍
El pasado viernes, un bombardeo en la ciudad de Nyabibwe, a solo 60 kilómetros al norte de Bukavu—la capital provincial—hirió a tres civiles y dañó infraestructura eléctrica crítica, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA). Este incidente forma parte de una tendencia creciente de enfrentamientos que están obligando a miles a huir de las zonas de combate en busca de seguridad.
Miles de personas ahora se están desplazando hacia Bukavu, que enfrenta amenazas de ataques rebeldes del Movimiento 23 de Marzo (M23), un grupo armado que genera inestabilidad en la región. Las Naciones Unidas y sus socios están evaluando activamente las condiciones críticas dentro y alrededor de Goma, donde cientos de miles permanecen desplazados.
Recientemente, ocurrió una tragedia cuando tres trabajadores de ONG fueron asesinados en un bombardeo en Kivu del Norte, lo que llevó a la suspensión de la asistencia esencial de alimentos y agricultura en el área. Mientras tanto, se estima que 33,000 personas han regresado a las aldeas en el Territorio Nyiragongo cerca de Goma, buscando refugio en medio del caos.
La atención médica en Kivu del Norte está en crisis. La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que muchas instalaciones médicas han sido destruidas o están luchando para operar debido a la escasez de medicamentos y trabajadores de salud saturados. Enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes y la hipertensión no están recibiendo la atención necesaria, exacerbando el sufrimiento de los residentes.
El riesgo de enfermedades infecciosas también está aumentando. Entre el 1 y el 27 de enero, se reportaron casi 600 casos sospechosos de cólera y 14 muertes en Kivu del Norte. Las interrupciones en el suministro de agua en Goma han llevado a los residentes a depender del agua del Lago Kivu, aumentando los riesgos de cólera. En respuesta, la OMS ha enviado suministros médicos de emergencia, kits de higiene y tratamiento de agua, y carpas adicionales para ampliar la capacidad hospitalaria en 1,000 camas. Sin embargo, los suministros se están agotando rápidamente y se requiere asistencia urgente.
La situación en Kivu del Sur sigue siendo crítica, destacando la necesidad urgente de una ayuda humanitaria integral para apoyar a los afectados por la violencia y el desplazamiento en curso.
Reference(s):
cgtn.com