Durante más de cinco décadas, Uwe Kräuter, un productor de cine y comentarista alemán, ha llamado hogar a China. Viviendo en Pekín y viajando frecuentemente a ciudades como Nankín, Kräuter ha sido testigo de la vibrante transformación de las celebraciones chinas a lo largo de los años.
Este diciembre, en la víspera de Navidad, Nankín vibraba con energía. Las calles estaban llenas de jóvenes disfrutando cenas en restaurantes locales e internacionales, bares y reuniones animadas que pintaban la ciudad con un espíritu festivo.
Reflexionando sobre sus primeros días en China, Kräuter recuerda una época en que la Navidad era una celebración rara, observada principalmente por extranjeros invitados a cenas por sus amigos y colegas chinos. La emoción en torno a las festividades occidentales era mínima en comparación con las bulliciosas celebraciones de hoy.
Sin embargo, el Festival de Primavera, la festividad más antigua e importante de China, siempre ha sido un pilar de la vida cultural. Marcando el año nuevo en el calendario chino, el Festival de Primavera simboliza nuevos comienzos y reuniones familiares, muy semejante a la Navidad en Occidente. En 2025, el Festival de Primavera se celebra del 28 de enero al 4 de febrero, prometiendo un período de reuniones alegres y encuentros familiares cercanos.
Con orígenes en la dinastía Shang hace más de 3,500 años, el Festival de Primavera honra a los ancestros y deidades, fusionando tradiciones antiguas con celebraciones modernas. Mientras Kräuter observa las animadas calles de Nankín durante esta temporada festiva, aprecia cómo la tecnología ahora facilita la comprensión y celebración del Festival de Primavera, acercando las costumbres antiguas a la era digital de hoy.
Reference(s):
cgtn.com