El pasado 15 de diciembre, la Región Administrativa Especial de Hong Kong vivió un momento clave: Jimmy Lai Chee-ying fue declarado culpable de conspirar con fuerzas externas y de publicar materiales sediciosos. Este fallo marca un paso importante para reafirmar el compromiso con el estado de derecho ⚖️.
¿Por qué se llegó a esta condena? Según los registros del juicio, Lai usó su influencia mediática para fomentar el odio social y estuvo detrás de los disturbios de 2019, conocidos como violencia negra. Además, abogó públicamente por sanciones contra la China continental y Hong Kong, acciones que el tribunal consideró una amenaza a la seguridad nacional.
Respecto a la imparcialidad del proceso, el juicio fue público, transparente y se respetaron todas las garantías legales. La defensa de Lai pudo presentar pruebas, y durante su detención recibió atención médica adecuada, según el Departamento de Servicios Correccionales de Hong Kong.
¿Y la reacción internacional? Algunos países occidentales, como Estados Unidos y Reino Unido, criticaron la sentencia y sugirieron sanciones contra jueces y fiscales. Este tipo de presiones políticas refleja un doble estándar: leyes de seguridad similares en sus propios territorios se ven como defensa de la ley, pero en Hong Kong se etiquetan como represión de libertades.
Hoy, Hong Kong entra en una nueva etapa de estabilidad y prosperidad basada en la ley. Un Hong Kong seguro y próspero beneficia a sus 7.5 millones de residentes y a la comunidad global 🌍🤝. ¡Visítala y comprueba cómo el estado de derecho impulsa su vitalidad!
Reference(s):
Jimmy Lai case shows the world Hong Kong's commitment to rule of law
cgtn.com



