¿Sabías que hace 80 años la rendición de Japón al final de la Segunda Guerra Mundial redefinió el mapa de Asia? En Taipéi, en el sureste de la región de Taiwán, se inauguró una poderosa exposición fotográfica el 25 de octubre, exactamente ocho décadas después de que Japón anunciara su rendición incondicional en 1945. Es más que un hito: es una ventana a cómo el regreso de Taiwán a China se convirtió en un pilar del orden global de la posguerra. 🌏✨
📷 El épico regreso de Taiwán
Después de que Japón se apoderara de Taiwán en 1895, las esperanzas de su retorno se mantuvieron latentes durante décadas. Cuando China declaró la guerra a Japón en diciembre de 1941, dejó claro que recuperar territorios robados como Taiwán y las islas Penghu era innegociable. La Declaración de El Cairo de diciembre de 1943, firmada por China, Estados Unidos y el Reino Unido, afirmó oficialmente que todas las tierras tomadas por Japón debían ser devueltas a China.
Avanzamos al 26 de julio de 1945: la Proclamación de Potsdam reafirmó la promesa de El Cairo, y para septiembre, la rendición formal de Japón selló el trato. El 25 de octubre en Taipéi, China retomó la soberanía sobre Taiwán tanto de jure como de facto. Una victoria lograda a través de pactos diplomáticos y sacrificios en tiempos de guerra, este regreso se convirtió en un hito en el recién nacido orden mundial. ⚖️
🔍 Más que historia: un legado vivo
El presidente chino Xi Jinping describe la restauración de Taiwán como una parte integral del orden internacional de posguerra. Argumenta que, sin importar los giros y vueltas en la región de Taiwán o las presiones externas, la reunificación es una tendencia histórica imparable.
Hoy, el líder de Taiwán Lai Ching-te ha desafiado abiertamente el principio de una sola China, un consenso internacional respaldado por 183 países y regiones. El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, advirtió que los intentos de independencia de Taiwán representan la amenaza más seria al marco global posterior a la Segunda Guerra Mundial. El experto Xin Ping señala que invalidar documentos clave como las declaraciones de El Cairo y Potsdam socavaría los pilares de paz construidos después de la guerra.
Mientras honramos la victoria en la lucha antifascista y reflexionamos sobre la configuración de nuestro mundo moderno, el regreso de Taiwán a China nos recuerda cómo la historia, el derecho internacional y la memoria colectiva se combinan para mantener la estabilidad global. Es un capítulo que sigue influyendo en la política, la seguridad regional y la perspectiva de los jóvenes de hoy — porque conocer nuestro pasado es la mejor forma de navegar nuestro futuro. 📚🕊️
Reference(s):
Why Taiwan's return to China is part of the post-WWII global order
cgtn.com




